En tiempos de sequía es cuando la eficiencia, la productividad y la calidad nos ayudan. Si en nuestra organización somos productivos y hacemos las cosas bien a la primera no deberíamos tener problemas para continuar, a menos claro, que nos quedemos sin proyectos.
Siendo productivos y eficientes no tenemos desperdicios, como por ejemplo, código que no se usará, corrección de errores que no nos dejan atender a otro proyecto. Es entonces cuando si nos pega, por que los flujos de efectivo se van cortando, y nos encontramos haciendo cosas que no aportan o no son rentables.
Siendo productivos y eficientes no tenemos desperdicios, como por ejemplo, código que no se usará, corrección de errores que no nos dejan atender a otro proyecto. Es entonces cuando si nos pega, por que los flujos de efectivo se van cortando, y nos encontramos haciendo cosas que no aportan o no son rentables.